Tenía ganas de enseñaros más fotos de nuestras vacaciones, aunque muchas de ellas ya habéis podido verlas en Instagram (@atrendylife). Este año fueron más improvisadas que otros.
No obstante, aunque cambiaba el escenario y la manera de afrontar las vacaciones (nada de aviones, en coche y tampoco muy lejos), las disfruté muchísimo. Han sido más cortas, pero más intensas aprovechando los buenos momentos y disfrutando con las cosas sencillas.
Aunque también fuimos a la montaña, los primeros días nos apetecía sol: estar tumbados sin hacer nada, comer, leer, dormir, cervecita y paseo. No buscábamos nada más, sino relax, relax y más relax. Soy muy activa y me cuesta mucho estar quieta sin hacer nada, pero tengo que reconocer que esos días de desconexión y "vagueando" me supieron a gloria...
Sois muchos los que me preguntasteis por el sitio en el que nos encontrábamos, pues bien, nos fuimos a Santa Susanna, un hotel que tenía buenísima pinta y que nos prometía cumplir lo que nosotros queríamos: descansar, desconectar y disfrutar del mar. La verdad es que lo cumplió con creces, el hotel era perfecto y la decoración toda en blanco transmitía mucha paz. Ya sabéis que a mí me encanta este color y que los hoteles con este mobiliario tienen un punto ganado, pero si además, tienen un toque de azul en pequeños detalles, ya me roban el corazón :)
El hotel era sólo para adultos y eso, también lo disfrutamos. No tengo nada en contra de las familias con niños, pero que estés en la piscina tranquilamente, sin niños con manguitos tirándose en bomba... ¡se agradece! Supongo que son etapas y habrá momentos para todo, pero hoy por hoy, nos apetecía estar tranquilos. Nos enteramos más tarde cuando reservamos, así que no penséis que íbamos como locos buscando hoteles que cumplieran esta condición :)
¿Lo mejor? Desde la piscina se veía el mar al estar en primer línea y era una auténtica maravilla...
Además, el hotel organizaba diferentes actividades: fiesta en la piscina o bien en el chiringuito que tenían al lado del hotel ya en la playa, fiestas "Remember" mientras disfrutabas de una cervecita o un buen cóctel. La parte del chiringuito me encantó (tenéis una foto arriba con sillones blancos y guirnaldas de colores), tomarse algo allí por la tarde-noche después de un paseo, nos sentaba fenomenal.
También disfruté mucho de las camas con dosel que había en el hotel, de hecho en ellas hicimos las fotos que vísteis en este post con vestido rosa. Súper cómodas y perfectas para tomar el sol durante el día o bien, tomar una copa por la noche...
Y por supuesto, siendo cómo nos gusta a los dos comer, también disfrutamos de la cocina del hotel. Era todo riquísimo y muy variado, aunque si tengo que elegir, me quedo con los postres. Había una variedad infinita cada día: fruta, tartas, repostería... aunque lo mejor fue la tarta de Ferrero Rocher que probé, ¡impresionante!
Aunque el mejor placer era levantarte por la mañana y poder ver el mar desde nuestra terraza... ¡eso no tiene precio!
Después de nuestra estancia, el hotel nos contactó porque quería hacer algo con los lectores de A trendy life, y qué mejor que sortear una noche en régimen de AD para dos personas a elegir entre los que la cadena Fergus Hotels dispone que los podéis consultar aquí.
Para participar es muy sencillo:
* Ser fans de A trendy life en Facebook aquí.
* Ser fans de Fergus Hotels en Facebook aquí.
* Dejar un comentario en esta entrada con vuestro email.
* Plazo: Domingo 14 de septiembre a las 23h.
¡Animaros a participar, es un premio GENIAL!
¡Feliz domingo!