Últimamente en este blog los post de belleza tienen mucha relevancia y constantemente os estoy hablando de productos que utilizo, nuevos descubrimientos y testeos que llevo a cabo. Para mí, el cuidado facial es fundamental, ya sabéis que me cuido muchísimo la piel del rostro y no escatimo en tiempo en limpiarla profundamente.
Hace unas semanas os contaba cómo había empezado a probar L’Oreal Paris Revitalift CicaCrem, una crema reparadora antiedad de uso diario. En este post (link a mi anterior post) os contaba todas las propiedades de la misma, entre las que destacan que esta crema antiarrugas reparadora contiene centella asiática, una planta con propiedades reparadoras capaz de autoregenerarse. repara así algunos signos de la edad al mismo tiempo que la hidrata, reduce las arrugas y mejora la firmeza.
Después de utilizarla durante varias semanas, puedo decir que he experimentado los siguientes cambios:
El primero es la LUMINOSIDAD. Para mí es la garantía de que una crema funciona o no: que dé luz a la piel. No olvidar como digo siempre, que eso también depende de que la limpieza previa haya sido realizada de manera eficaz. Si la piel no está limpia, el producto no penetra y por muchos principios activos que lleve, sus propiedades se verán mermadas si el estado de la piel no es el idóneo para aplicar el tratamiento.
Lo segundo es HIDRATACIÓN: su textura ligera y sedosa deja la piel aterciopelada, me encanta esa sensación, es como notar que la crema realmente está actuando.
Lo tercero es que hace que sientas tu piel PROTEGIDA y FORTALECIDA. Vivo en una zona donde hace frío y la piel se resiente más de lo habitual. Y a eso le sumamos mis escapadas durante este tiempo a la montaña. Con Revitalift CicaCrem he notado que la piel se resiente menos, y es ideal para la reparación de la barrera de la piel.
El cuarto factor es la firmeza. La piel está más lisa y uniforme.
Y por último las arrugas. En tan poco tiempo es difícil apreciar cómo los signos de envejecimiento y las líneas de expresión han disminuido, pero noto la piel más tersa y con un aspecto mucho más saludable.
La crema además se absorbe muy fácilmente, así que es perfecta para quienes por la mañana vamos con prisa y necesitamos después maquillarnos enseguida.
Yo la aplico después de mi rutina, concretamente después de mi sérum con movimientos circulados y profundizando alisando el rostro desde el interior hacia el exterior. Con un poco cantidad de producto sirve y también la aplico en el cuello con movimientos ascendentes, que es el gran olvidado (si lo hacéis en el escote, ya es de nota)
Además, no tiene parabenos y es hipoalergénica.
¿La habéis probado?
Os la recomiendo, aquí tenéis más información sobre sus características y que creo que os puede servir, donde os explican cómo reparar la piel en profundidad con esta crema.