El post del viernes es un poco diferente. No, no me he vuelto loca y a partir de ahora voy a compartir con vosotras mis recetas de cocina (más que nada porque tengo muuuucho que aprender), pero sí que quiero contaros la tarde tan chula que pasé con mi madre haciendo estas delicias y lo cierto, es que no sabéis como disfruté... ¡gracias mamá!
Creo que por todos es sabido que soy súper golosa: me encanta el dulce en todas sus versiones y siempre que puedo aprovecho para tomarlo... ¡con azúcar la vida se ve de otra manera! Pues bien, con motivo de la campaña #PostresBelbake de Lidl (ya sabéis el supermercado con buena relación calidad precio) y de su promoción "Dulce Cocina", me han querido hacer partícipe de ella...
¿Cómo? Enviándome sus productos, utensilios e ingredientes (que podéis encontrar aquí y aquí, promoción a partir del 31 de marzo) para convertirme en chef por unas horas... (menudo reto!)
Aunque contenta con mi resultado, os cuento un poquito lo que hicimos: palmeras de hojaldre y unos cupcakes (los primeros que hacíamos no nos lo tengáis en cuenta)
Me enviaron muchísimo material para que diera rienda suelta a mi creatividad, pero a veces hay que apostar por cosas más sencillas...
En el caso de las palmeras de hojaldre, con la masa que me enviaron lo que hicimos fue extenderla bien y ponerle mucho azúcar (para que luego el resultado fuera muy dulce, también podéis ponerle menos cantidad, pero en mi casa somos muy golosos). Una vez glaseado el hojaldre, se enrolla por cada lado hasta juntarse ambos rollos en el centro y a partir de ahí con un chuchillo, se van cortando pequeñas tiras de no más de 1cm (aunque con alguna se me fue la mano...)
Luego ya las ponemos en la bandeja y listas para hornear durante 10 minutos. A nosotros nos gustan un poco doraditas, así que íbamos vigilando sin abrir el horno para que no se bajasen...
Para las magdalenas fue más sencillo, con este preparado que os enseño fue muy fácil: sólo había que batirlo bien y ponerlo posteriormente en los moldes y al horno.
Lo que peor nos salió fue la crema que recubre los cupcakes, pero lo bueno es que siempre podemos repetir e intentar mejorarlos... No obstante, les puse bien de toppings para que quedasen bien y el sabor era muy rico... ¡ahora sólo queda practicar!
La verdad es que estoy muy contenta con el resultado... ¡a la vista está! Además, sin mi madre no hubiera sido posible, pero yo creo que ya puedo practicar solita que no me pareció tan complicado... ¡a ver si ahora me voy a aficionar a la repostería!
Et voilà, ya tenemos merienda para el fin de semana...
Yo os invito a seguirme en instagram (@atrendylife) porque pronto me vais a ver elaborando más postres... ¡qué ganas!
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