Creo que mi palabra favorita es VIAJAR. Suena bonita y en su interior, esconce tantas maravillas que es imposible no esbozar una sonrisa cuando la escucho. Ya sabéis que ir de un lado a otro y conocer otras culturas es uno de mis hobbies, por eso, para mí viajar es mucho más que hacer turismo, viajar es dejarte llevar, improvisar, resolver imprevistos que van surgiendo sobre la marcha y sobre todo, sorprenderte con todo lo que estás descubriendo por el camino.
VIAJAR ES VIVIR.
La semana pasada estaba disfrutando de Oporto. Un total de 4 noches y 5 días que hicieron que me enamorara todavía más si cabe de esta ciudad. Es increíble cómo una ciudad que tenemos tan cerca puede calarte tanto. Descubrí Portugal hace un par de años, había visitado Lisboa y alrededores, y en mi lista siempre tenía pendiente escaparnos aquí, a Oporto. Por A o por B siempre lo íbamos dejando, hasta que por fin pudimos disfrutar de esta maravilla de ciudad, en la que combiné tanto ocio con Yago que estuvo hasta el domingo por la tarde, como trabajo, ya que estuve con el equipo de PARFOIS hasta el martes, y eso hizo que el tándem fuera perfecto.
A la hora de viajar tengo en cuenta muchos factores: el tiempo es uno de ellos. Depende mucho el tiempo que va a hacer en la ciudad para que ésta sea más apetecible o no. En Oporto pasamos calor, hizo un tiempo maravilloso, la verdad, yo casi yo iba preparada con prendas de tirantes, pero disfrutamos muchísimo del solazo y de los buenos días que nos hicieron. Quizá en mi último día , el tiempo se volvió peor, hacía mucho sol, pero también mucho aire y eso es siempre algo más incómodo...
Otro de los temas que tengo en cuenta son los hoteles. Duermo muchísimo fuera de casa y para mí es clave que me sienta a gusto, que sea bonito y confortable. La situación para mí también es clave, queríamos un hotel cerca de La Ribeira de Oporto y este está al lado. Gracias a hoteles.net, encontramos el hotel perfecto para pasar esos días allí, quienes nos lo pusieron muy fácil a la hora de gestionar y decidir nuestro alojamiento y estuvo de 10. Tiene hoteles en todo el mundo y a cual mejor, aunque yo ya había estado mirando y tenía un claro favorito y ganador y aquí nos quedamos.
Nuestra habitación era amplia y cómoda y tenía estas vistas increíbles (lo que veis al fondo es el famoso puente Don Luis I de Oporto), súper luminosa, confortable, bien decorada y los desayunos eran increíbles, además de las zonas comunes. ¡Volveremos!
Aprovechando un día que madrugamos para salir a hacer unas fotos, hicimos estas antes de que saliera más el sol y me encantan... ¡tienen algo especial! ¿No os parece?
¡Deseando contaros mi próxima escapada!
¡Un abrazo!